Seguro de viaje a la Ciudad del Vaticano
La Ciudad del Vaticano tiene una serie de atracciones famosas en el mundo entero que atraen a católicos, otros cristianos y turistas en general, desde la basílica de San Pedro a la plaza de San Pedro a la Capilla Sixtina o a la Biblioteca Vaticana. El turismo es una importante fuente de ingresos para la economía de la ciudad, pues recibe más de 5 millones de visitas al año. Al Vaticano acuden numerosos peregrinos durante las importantes celebraciones del año litúrgico, como la Navidad o la Semana Santa, pero dada su ubicación dentro de Roma, también es un destino popular durante la temporada de verano. Si piensa visitarla, asegúrese de comprar un seguro de viaje a la Ciudad del Vaticano para protegerse de cualquier imprevisto que pudiera suceder.
La Ciudad del Vaticano es una ciudad-estado independiente situada dentro de la ciudad de Roma, en Italia. Con una superficie de solo 0.44 km2, es el país soberano más pequeño del mundo. La Ciudad del Vaticano es la sede de la Iglesia Católica Romana y, como tal, está gobernada por el papa en su calidad de obispo de Roma y cabeza de la Iglesia. El papa se apoya en la Santa Sede, el gobierno de la Iglesia; las más altas autoridades del estado son todos miembros del clero católico. La ciudadanía de la Ciudad del Vaticano no se adquiere por nacimiento o nacionalidad, sino por nombramiento para trabajar en un puesto determinado para la Santa Sede. El Vaticano tiene una población estimada de 1,000 habitantes, por lo que también es el país menos poblado del mundo.
Recuerde que en cualquier destino de gran afluencia turística –especialmente en espacios abiertos- hay bastantes carteristas y tironeros. En este caso, por la mera gran cantidad de visitantes que abarrotan un área tan pequeña, la Ciudad del Vaticano tiene la tasa de criminalidad per cápita más alta de cualquier país del mundo, aunque la inmensa mayoría de los incidentes denunciados son pequeños hurtos. Recuerde estar pendiente de sus pertenencias y de guardar objetos importantes (pasaporte, tarjetas de débito, tarjeta de identificación) fuera del alcance de manos codiciosas. ¡Esté atento a sus alrededores y manténgase seguro!
La basílica de San Pedro
La construcción de la basílica de San Pedro comenzó en 1506 y terminó en 1626. Diseñada por famosos artistas del Renacimiento, como Miguel Ángel y Bernini, es el ejemplo máximo de la arquitectura de la época y tiene el honor de ser la iglesia más grande del mundo. Conforme a la tradición católica, la basílica es el lugar donde está enterrado San Pedro, líder de los apóstoles de Jesús y el primer papa. Según la leyenda su tumba está bajo el altar de la basílica. Desde entonces, muchos papas han sido enterrados en la Necrópolis Vaticana debajo de la iglesia.
En la iglesia cabe una congregación de más de 60,000 personas. Su interior resplandece con las esculturas y obras de arte de Bernini, Miguel Ángel (incluida su famosa Piedad), Giotto y Borromini. Su cúpula central se eleva a 119 metros del suelo. Si quiere hacer ejercicio, puede subir los 330 escalones dentro de la cúpula hasta un área de observación que se asoma a la plaza de San Pedro.
La plaza de San Pedro
La plaza de San Pedro, conocida localmente como la Piazza San Pietro, es una gran plaza abierta en el exterior de la basílica. El recinto oval mide más de 370 metros de largo, y está circundada por columnatas semicirculares de cuatro columnas de profundidad con 140 estatuas de distintos santos católicos. En el centro de la plaza se erige un obelisco egipcio de 25 metros traído a Roma por el emperador Calígula en el año 39 de nuestra era; se trasladó a su ubicación actual en 1586. La plaza es un lugar de reunión religiosa para los católicos. Al extremo de la plaza está una fachada de la basílica con un balcón central desde el que el papa imparte en ocasiones su bendición –y donde miembros más antiguos del Colegio Cardenalicio se asoman para anunciar cada nuevo papa.La plaza de San Pedro, conocida localmente como la Piazza San Pietro, es una gran plaza abierta en el exterior de la basílica. El recinto oval mide más de 370 metros de largo, y está circundada por columnatas semicirculares de cuatro columnas de profundidad con 140 estatuas de distintos santos católicos. En el centro de la plaza se erige un obelisco egipcio de 25 metros traído a Roma por el emperador Calígula en el año 39 de nuestra era; se trasladó a su ubicación actual en 1586. La plaza es un lugar de reunión religiosa para los católicos. Al extremo de la plaza está una fachada de la basílica con un balcón central desde el que el papa imparte en ocasiones su bendición –y donde miembros más antiguos del Colegio Cardenalicio se asoman para anunciar cada nuevo papa.
La Capilla Sixtina
La Capilla Sixtina es una capilla del Palacio Apostólico, la residencia del papa. Se restauró entre 1473 y 1484 por orden del papa Sixto IV. En ella se reúne el cónclave tras el fallecimiento (o, en ocasiones, la renuncia) de un papa, para elegir al sucesor. Sus paredes laterales están decoradas con frescos de escenas bíblicas pintadas por algunos de los mayores pintores del Renacimiento: Perugino, Boticelli, Roselli y Signorelli, entre otros. La pared izquierda está decorada con escenas del Antiguo Testamento y la derecha con escenas del Nuevo Testamento. Los frescos de la bóveda fueron pintados por Miguel Ángel entre 1508 y 1512, el más famoso de los cuales es la creación de Adán. Tras el altar hay otro fresco de Miguel Ángel en que se representa el Juicio Final tal como se describe en el Apocalipsis. Estos frescos hoy en día se considera que están entre los mayores logros de la pintura europea.
Los museos vaticanos
Los museos vaticanos son una serie de museos de arte cristiano que contienen la más amplia colección de escultura antigua del mundo. Cuentan con más de 70,000 obras reunidas por los papas a lo largo de los siglos, 20,000 de las cuales están en exhibición. Combinados serían el cuarto museo de arte más visitado del mundo, con más de 6 millones de visitas solo en 2017. Tienen 54 galerías en total. En ellos destacan obras maestras de Giotto, Leonardo da Vinci y Tiziano; las Salas de Rafael, con el famoso cuadro “la escuela de Atenas”; la Galería de Mapas; sarcófagos de los primeros cristianos; y la Escalera de Bramante, una escalera de doble hélice instalada en 1932.
La Biblioteca Apostólica Vaticana
La Biblioteca Apostólica Vaticana fue formalmente establecida en 1475. Contiene un millón cien mil libros, 75,000 códices, 25,000 libros manuscritos de época medieval y 8,500 incunables (libros impresos antes del día de pascua de 1501). Sirve principalmente de biblioteca de investigación para estudiantes de historia, derecho, filosofía y teología, aunque también contiene obras que se pueden hojear casualmente. Destacan en exhibición biblias iluminadas a mano, códices bíblicos, pergaminos y papiros antiguos, y pergaminos manuscritos. También incluye una colección de monedas y medallas pontificias, y los archivos secretos del Vaticano (“secretos” en el sentido de “de propiedad privada”, no necesariamente “confidencial”), que ahora se denominan Archivo Apostólico Vaticano, contienen otros 150,000 documentos.
Conviene señalar que las compañías locales ofrecen diversas variaciones de un recorrido “para saltarse la fila”, un recorrido guiado a pie de la basílica de San Pedro, la Capilla Sixtina y los Museos Vaticanos. Hay que comprar las entradas por adelantado, pero le permiten evitar las filas a la entrada de ciertos lugares.
La cocina en la Ciudad del Vaticano
Dada su ubicación en el corazón de Roma, no le sorprenderá saber que la comida italiana es la oferta culinaria principal de la Ciudad del Vaticano. Los restaurantes y cafés locales, grandes y pequeños, de cualquier rango de precios, ofrecen de todo, desde espaguetis a fettuccini alfredo, a pizza o risotto. De postre suelen ofrecer gelato (helado) italiano, tiramisú y cannolo.
Seguro de viaje a la Ciudad del Vaticano
Antes de reservar su viaje, le aconsejamos encarecidamente que compre un seguro médico de viaje or un seguro de viaje. El seguro médico de viaje ofrece seguro médico mientras viaja por el extranjero. Entre sus prestaciones estándar destacan cobertura de interrupción de viaje, evacuacione médica de emergencia/repatriacion, regreso de restos mortales, muerte y desmembramiento accidental, así como otras prestaciones adicionales como asistencia en casos de robo de identidad, atentados terroristas y desastres naturales. El seguro de viaje principalmente ofrece cobertura de los gastos prepagados y no reembolsables en situaciones como atención médica de emergencia, interrupción del viaje, pérdida de equipajes, transferencias urgentes de dinero en efectivo, cobertura de alquiler de auto y accidentes aéreos. Asegúrese de leer con detenimiento la letra pequeña de su plan para más detalles.
Nuestros experimentados representantes licenciados estarán encantados de ayudarle a elegir el plan que mejor se adapte a sus necesidades individuales.